domingo, 29 de septiembre de 2013

Cake Pops

¡Hola visitantes!, la tarde de hoy ha sido muy divertida, hemos practicado con Cake Pops y puedo asegurar que ESTABAN riquísimos y digo que estaban porque ya no queda ni uno.
Hemos tenido la ayuda de la peque de la casa, se lo ha pasado genial ¡y nosotros mas aún al verla disfrutar tanto! por lo que la diversión se ha multiplicado por 1000. No dudéis hacer esta receta con los niños porque disfrutaréis viéndolos muchísimo...




Los Cake Pops (para aquellos que no conozcan su existencia), son pequeñas esferas o cubos cubiertos de chocolate, unidos a un palo simulando un chupa chups o piruleta. Puede ser una manera original de utilizar los restos de una tarta de cualquier sabor o un bizcocho y válidos para decorar cualquier preparación dulce con la que queráis sorprender a quien sea.






Ingredientes

8 Magdalenas o los restos de un bizcocho o tarta
2 cucharadas y media de queso crema tipo Philadelphia 
2 tabletas y media de chocolate blanco 
Tinta alimenticia de colores (por lo menos los colores básicos)
Decoraciones de azúcar (lagrimitas de colores, fideos de chocolate, pasta de azúcar etc) 
Palos de madera (tipo brochetas) o palos específicos para Cake Pops
1 base de corcho blanco 

Preparación

Una vez hecho el bizcocho y hayamos obtenido los restos necesarios para poder formar una buena cantidad de bolas (tamaño albóndiga) los desmenuzamos hasta conseguir migas. Estas migas las mezclamos con el queso tipo crema o cualquier glaseado, chocolate derretido etc. Mezclamos hasta conseguir una masa compacta y homogénea para moldear las formas con las manos sin ningún problema.




Cuando las tengamos todas hechas, refrigeramos en un recipiente durante unos minutos para que cojan una textura uniforme. Ahora procedemos a derretir una pequeña cantidad de chocolate (unas 6 onzas) en el microondas e iremos mojando los 2 primeros centimetros de nuestro palo en el chocolate para introducirlo en nuestra bola. 
Una vez estén todas, hay que refrigerar 15 minutos como mínimo para que el chocolate se endurezca y ayude a que nuestro Cake Pop no se despegue. (este paso es esencial si queréis que el resultado sea el correcto)




Al sacarlas del frigorífico, ya tendremos el chocolate derretido y dividido en varios recipientes (en el caso de que queráis teñir el chocolate de diferentes colores). Realizaremos el mismo paso en todos nuestros Cake Pops.
Mojamos con mucha delicadeza cada bola sosteniéndola por el palo, una vez cubierta daremos pequeños golpes secos para desechar el chocolate sobrante. Si vais a hacer algún tipo de decoración este es el momento indicado para que lo hagáis. Si no se os ocurren ideas divertidas solo tenéis que pinchar aquí , seguro que hay algo que os encanta. Inmediatamente los iremos pinchando en nuestra base de corcho que ira al refrigerador durante media hora como mínimo.



Una vez fríos nuestros Cake Pops podemos seguir decorando, dibujando o pegando con ayuda de mas chocolate derretido. Nosotros hicimos pequeñas formas con masa fondant y dimos los últimos retoques con rotuladores de tinta comestible ¡les quedaron genial a la peque!.





En fin visitantes, animaos a hacerlos, animad a vuestros sobrinos, hermanos, primos, nietos y darle rienda suelta a vuestra imaginación que segura estoy que os sorprenderéis de vosotros mismos.
Solo espero que hayáis disfrutado al menos.... la mitad que yo. ¡BUEN PROVECHO!

viernes, 27 de septiembre de 2013

Cookies XXL "tipo Starbucks"

¡Hola visitantes!, hoy os traigo una americanada hiper sencilla para hacer una mención de honor a Starbucks , ¡qué me chifla!, ¡me fascinan los cafés!, ¡sus tartas!, ¡las galletas!, ¡chocolatinas!... en fin, entre tanta variedad siempre me resulta muy difícil decidirme pero hoy voy a optar por la receta de las Cookies XXL, muy fáciles de hacer, de comer y apta para disfrutarla en familia como a mi me gusta. 



Os puedo contar que el significado "cookie" es un término anglosajón que significa "galleta" pero lo hemos utilizado para identificar este tipo. No es más que una pasta hecha principalmente de harina y azúcar con lagrimas de chocolate, sencillo, pero ¡¡¡¡¡cómo nos gusta!!!!!.

Hace unos meses publiqué una receta muy parecida de cookies de chocolate blanco que tuvieron muchísimo éxito, en esta ocasión he cambiado un poco la receta pero no quiere decir que la anterior no estuviera igual de buena ¿eh?.




Ingredientes

210 g de harina
3/4 de cucharadita de bicarbonato sódico (en Mercadona lo venden)
3/4 de cucharadita de levadura
1 pizca de sal
150 g de azúcar moreno
100 g de azúcar blanco
1 huevo grande o 2 medianos
1 cucharadita de extracto de vainilla
180 g de lagrimitas de chocolate (se pueden mezclar blanco y negro e incluso trocear la tableta) 


Preparación

Empezamos tamizando los ingredientes secos en un bol; la harina, levadura, sal y el bicarbonato sódico.

En otro bol o en una procesadora tipo Thermomix, batimos a velocidad media la mantequilla hasta que su textura sea parecida a la pasta de dientes y añadimos los azúcares, los huevos y la esencia de vainilla. Mezclamos durante unos 5 minutos bajando poco a poco la intensidad de mezclado.

Añadimos los ingredientes secos a nuestra preparación y mezclamos hasta que todo quede muy bien integrado. Finalmente añadimos los chips de chocolate que removeremos con cuidado, unicamente para que se mezclen, no queremos batir en exceso. (podemos añadir frutos secos tipo cacahuetes, pistachos, avellanas ¡¡lo que vuestro paladar os pida al body!!). 




Precalentamos el horno a 180º y a continuación haremos pequeñas porciones irregulares (no hace falta que sean redondas perfectas puesto que la galleta cogerá su forma peculiar de cookie una vez se estén horneando) y las iremos colocando ordenadas en una placa de horno previamente forrada con papel vegetal.



Transcurridos entre 15-20 minutos las sacaremos del horno y las colocamos con cuidado en una rejilla. (en mi caso en varias porque salieron unos galletones del tamaño de una mano y no os asustéis si de primeras las notáis blandas. Poco a poco se irán endureciendo según pierdan temperatura).



En cuanto a su conservación es muy fácil, solo tenéis que meterlas en cualquier caja de metal o cerrada al vacío y os aguantaran por días sin ningún problema.

¡Así que esto es todo por esta vez!, y os decidís a probar no dudéis en escribirme vuestra experiencia, os contestaré encantada.

Solo espero que hayáis disfrutado al menos... la mitad que yo. ¡BUEN PROVECHO!